A sus 82 años, la exconductora de TV y escritora Gigliola Zecchin, más conocida como Canela, realizó la confesión más impactante de su larga trayectoria pública: contó que sufrió un abuso en su infancia en Italia.
En una entrevista en el canal A24, conducida por el periodista Luis Novaresio, la reconocida profesional de la televisión relató por primera vez cómo vivió en silencio ese episodio traumático, y cómo la escritura se transformó en su vía de expresión y sanación. “Yo fui abusada, nunca lo pude contar hasta ahora”, dijo ella, quien eligió dar a conocer su experiencia para dar voz a quienes no pueden hacerlo.
“Conté que sufrí un abuso porque surgió de la escritura. Yo no hablé nunca con nadie de esta experiencia cuando era niña, tan pequeña. Simplemente fluyó y sentí que tenía hoy que dar testimonio en nombre de todos los niños que sufren abuso y que no lo pueden decir”, expresó con dolor durante la conversación televisiva nocturna.
La autora describió el contexto en el que ocurrió el hecho, aludiendo a los “ámbitos de abandono que los chicos padecen en esos límites que plantea el hambre, la guerra, el miedo, lo que fuese, cualquiera de las cosas que hacen que una madre deje a su hijo en un lugar poco conocido. Y bueno, allí fui abusada y la manera en que lo cuento tiene que ver con la niña que nunca abrió los ojos“, recordó con estremecimiento.
Y evocó con detalle las sensaciones de horror que la marcaron de pequeña: “Nunca sentí necesidad de contarlo, era una manera de preservarme, ¿qué hubiera pasado si lo hubiera podido contar? Tenía tanto terror y me sentía tan invadida por algo monstruoso que ni siquiera pensé que era una persona”.
Y dio detalles puntuales en donde sucedió aquel revulsivo episodio: “Tengo muy presente lo siniestro de ese lugar: las gallinas, un gallo que las perseguía, el olor a cebolla. Todo lo tengo grabado”, relató a A24.
La escritora también confesó que nunca abordó este tema en terapia, reconociendo que “era algo muy metido dentro de mí. Nunca sabré qué me deja esta experiencia”.
Consultada por Novaresio sobre qué le diría hoy al hombre que la abusó, ella respondió: “Le pediría que se arrodillase y me pidiera perdón. ¿Lo perdonaría? No lo sé”, se sinceró.
De la Italia de posguerra al éxito en TV en Argentina
La vida de Gigliola Zecchin estuvo marcada desde sus primeros años por la precariedad y el miedo, circunstancias que se remontan a su nacimiento en Vicenza, Italia, en 1942, plena Segunda Guerra Mundial.
Tras la muerte de su padre, su madre decidió emigrar a la Argentina en 1951 junto a sus hijos, instalándose inicialmente en Córdoba. “Cuando llegamos, para nosotros esto era América. No sabíamos que era la Argentina”, evocó Zecchin.
El reconocimiento a una trayectoria multifacética y sostenida en el tiempo fue una constante en la vida de quien dejó una huella indeleble en el periodismo cultural, la literatura infantil y juvenil, y la producción audiovisual.
La labor de Canela en los medios de comunicación comenzó en 1962, cuando inició su actividad como locutora nacional, periodista, conductora, guionista y creadora de contenidos tanto en radio como en televisión.
Su versatilidad se reflejó en la conducción y producción de ciclos radiales como La veleta de los cuentos y Cuentos a los cuatro vientos en Radio Municipal, así como La luna de Canela en Radio Nacional.
Entre 1991 y diciembre de 2000, lideró el programa Generaciones en Radio Nacional, una propuesta de periodismo cultural producida junto a su hija Aldana Duhalde.
En televisión, Canela condujo ciclos emblemáticos como Buenas tardes, mucho gusto, En casa de Canela, La luna de Canela, Para crecer, Café con Canela (junto a María Rosa Grandinetti y Clara Zappettini), De igual a igual y La otra Tierra. Desde 1996, se mantuvo al frente de El periodismo que viene en Canal 13-TN, un espacio dedicado a estudiantes avanzados de Comunicación Social.
A partir de 2001, asumió la conducción de Colectivo Imaginario en TN y, entre enero y marzo de 2004, produjo y emitió la serie documental Retratos Argentinos, centrada en personalidades de la cultura nacional, ciclo que se repitió en el verano de 2005.
La gestión y producción de contenidos también la llevó a fundar en 1999 Canela Producciones, Mediomundo TV, con sede en Buenos Aires. Ese mismo año, organizó para la Secretaría de Cultura de la Nación un concurso de guiones para video sobre la vida y obra de Jorge Luis Borges, cuyos materiales se distribuyeron en escuelas de todo el país.
En el ámbito editorial, Canela fue directora del Departamento de Literatura para Niños y Jóvenes en Editorial Sudamericana entre 1987 y 2002. Durante ese período, concibió doce colecciones y editó más de 250 títulos, impulsando la literatura infantil y juvenil en Argentina.
Su labor autoral es igualmente prolífica: ha publicado unos 30 libros para niños y 5 para adultos. Entre sus obras infantiles destacan Marisa que borra (incluido en el catálogo White Ravens de Alemania en 1990), Para cuando llueve, Boca de sapo, Barco pirata, la serie LOLA y la colección Mona Lisa. Para adultos, sobresale el poemario Paese, publicado en 2001 y traducido al italiano por la Universidad de Siena en 2007.
La participación de Canela en congresos nacionales e internacionales ha sido constante, con intervenciones en eventos como el Congreso del IBBY Internacional en Sevilla (1994), la Feria Internacional del Libro Infantil en Bolonia (1995 y 1997), y jornadas y congresos en Argentina, Costa Rica, Italia y España, donde se desempeñó como expositora y representante de la Secretaría de Cultura de la Nación.
Su compromiso con la promoción de la lectura y la literatura se extendió a la realización de documentales, como Flores 200 años, emitido por Canal A en 2006, y a la organización de concursos y jurados en certámenes de cuento, periodismo cultural y literatura infantil, tanto a nivel nacional como en instituciones como la Fundación Octubre y la Fundación Bunge & Born.
El reconocimiento a su trayectoria se refleja en una extensa lista de premios y distinciones. Canela ha recibido la Orden de Caballero del Gobierno Italiano, la Medalla de Oro de la Ciudad de Vicenza, la Cruz de Plata Esquiú por su programa La luna de Canela, y el Premio Santa Clara de Asís en 1997.
Además, fue galardonada en varias ocasiones con el Martín Fierro: en 1997 por El periodismo que viene (mejor conducción femenina en televisión por cable), en 1998 (mejor programa periodístico de televisión por cable) y en 1999 (mejor programa juvenil). Obtuvo el Premio Fund TV 2000 a la creatividad y al mejor programa educativo por El periodismo que viene, el Premio Manuel Belgrano 1999 a la ética y consagración al periodismo, y el Premio Broadcasting 2002 por Colectivo Imaginario.
Entre los galardones internacionales, destaca la inclusión de su libro Marisa que borra en el catálogo White Ravens International, y la distinción como Personalidad Destacada de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires en 2007. Y en 2010, recibió la Medalla del Bicentenario por su amplia trayectoria.
La formación académica de Canela incluye estudios de Castellano en la Escuela Superior de Lenguas de Córdoba, Letras Modernas en la Universidad Nacional de Córdoba y la obtención del título de Locutora Nacional por el ISER.
Su actividad institucional la llevó a presidir el congreso de Previsión Social de Argentores entre 1998 y 2001, integrar su comisión directiva de 2001 a 2005 y ejercer la vicepresidencia de 2006 a 2007.
Desde 2019, se ha alejado de la televisión para dedicarse a la poesía. Su próximo libro llevará por título Caja Dolora, sobre el cual explicó a A24: “Le quise poner el femenino al dolor, porque somos nosotras las que parimos con dolor”.