Tucumán: murió la nena de 7 años baleada mientras jugaba en el patio de su casa y vecinos incendiaron la casa de los presuntos asesinos

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Zoe Robledo, la nena de 7 años que este jueves había recibido un tiro en la cabeza mientras jugaba en el patio de su casa en el barrio San Cayetano de la ciudad de San Miguel de Tucumán, murió anoche a causa de la grave herida de bala sufrida. “Mi hija acaba de fallecer. Que se haga justicia y que los asesinos paguen”, reclamó Claudia, madre de la víctima, al confirmar el fallecimiento de la menor. Y mientras la Policía mantiene detenidos a dos sospechosos, vecinos y amigos de la familia incendiaron la casa de los presuntos asesinos.

Después de varias horas de angustia, Claudia, la mamá de Zoe, brindó una breve atención a la prensa desde la puerta del centro de salud y confirmó la lamentable noticia. “Mi hija acaba de fallecer, me lo confirmó la directora del hospital. Que se haga justicia y que paguen por la muerte de mi hija. Tenía 7 años y toda su vida por delante”, comentó entre lágrimas la mujer, en diálogo con el noticiero “Vivo Noche” (El Ocho).

Con evidente angustia, y rodeada por algunos de sus seres queridos, la mujer pidió justicia por su niña. “Que lo busquen al verdadero asesino y que a los dos que están presos no les den cuatro meses de preventiva. El mayor tiene que estar alojado en un penal para que no esté en comisaría, para que tenga un celular y se burle”, subrayó.

De esa manera, Claudia se refirió a los dos sospechosos detenidos hasta el momento: un joven, de 19 años, y un menor, de 16.

Personal policial trabajando anoche en la escena del hecho

La Unidad de Homicidios I del Ministerio Fiscal, que conduce Pedro Gallo, acusó a ambos por el delito de homicidio doblemente agravado por el uso de armas de fuego, en grado de tentativa, y por el concurso premeditado de dos o más personas, en grado de tentativa y en calidad de coautores. Sin embargo, fuentes judiciales consultadas este sábado por Infobae adelantaron que, con la muerte de Zoe ya consumada, seguramente se reformularán los cargos para los imputados.

Tras confirmarse la muerte de Zoe, vecinos del barrio San Cayetano incendiaron la casa de los presuntos asesinos.

En representación del fiscal Gallo, su auxiliar, Lucas Manuel Maggio, describió el hecho, enumeró las evidencias y solicitó la prisión preventiva para el mayor por el término de cuatro meses. En tanto, para el cómplice menor se ordenaron disposiciones provisorias por igual término.

Según pudo reconstruir la Fiscalía, eran las 16 del pasado jueves cuando la niña de siete años se encontraba junto a otros menores jugando en un patio en el frente de su domicilio, ubicado sobre la calle Ricardo Rojas, y se hicieron presentes en la vereda los dos acusados en compañía de otros dos (entre ellos el apodado “Chueco”).

En ese contexto fue que “Chueco” extrajo de entre sus ropas un arma de fuego y comenzó a efectuar disparos mientras los otros cómplices, actuando en forma conjunta y coordinada, insultaban y arengaban al tirador. Uno de los disparos efectuados impactó en la cabeza de la niña ocasionándole un orificio de entrada y salida, y fue trasladada de urgencia a un centro asistencial de la zona por familiares y luego derivada al Hospital de Niños, donde estuvo más de un día internada, hasta que falleció.

Por su parte, los atacantes se dieron rápidamente a la fuga. Sin embargo, la Policía se movió rápido y detuvo a dos de los sospechosos: un joven de 19 años -alias “Menor”, aunque podrían referirse a un apodo policial- y un adolescente de 16, conocido como “Ratón”. Estos dos acompañaban a “Chueco” y a otro cómplice, quienes se encuentran prófugos y son buscados intensamente. Una cámara de seguridad registró la huida de ambos.

En la audiencia, la jueza actuante hizo lugar a lo solicitado por la Fiscalía, mientras continúan con las tareas para dar con el paradero de los otros sospechosos, entre ellos, quien habría realizado los disparos.

Las fuentes consultadas por este medio indicaron que, si bien hasta el momento no se conoce el motivo, una hipótesis señala que podría estar vinculado a cuestiones de drogas, ya que tanto la expareja -fallecida- como la actual pareja de la madre de la víctima estuvieron presos.

La mujer, por lo pronto, no aportó demasiados datos, aunque las fuentes remarcaron que en ese sector de San Cayetano existen antecedentes de conflictos entre familias y lo señalaron como un barrio peligroso.