En la Patagonia argentina todavía se mantiene el temporal con fuertes vientos. La provincia que más se verá afectada esta jornada es Santa Cruz, que ya extremó precauciones para enfrentar un pronóstico de vientos intensos que, según el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Santa Cruz, obligará a implementar medidas excepcionales.
La decisión de suspender la asistencia presencial de los trabajadores de la administración pública provincial afecta a un conjunto de localidades especialmente expuestas a las condiciones extremas. De acuerdo con la información difundida por el COE, la medida regirá durante toda la jornada para Río Gallegos, Puerto Santa Cruz, Piedra Buena, Caleta Olivia, Las Heras, Cañadón Seco, Pico Truncado, Jaramillo, Fitz Roy, Puerto San Julián, Puerto Deseado y Koluel Kayke.
En estos mismos distritos, se dispuso la suspensión total de clases en todos los niveles y modalidades, abarcando los turnos mañana, tarde y noche. El resto de las localidades de la provincia mantendrá sus actividades habituales.
El COE Santa Cruz subrayó que la adopción de estas medidas responde a la criticidad del fenómeno y a las recomendaciones de los organismos técnicos, con el objetivo de preservar la seguridad de la población. Las autoridades reiteraron la importancia de extremar los cuidados y evitar la circulación innecesaria mientras persistan los vientos intensos, e insistieron en que el monitoreo de la situación es permanente, con la posibilidad de emitir nuevas actualizaciones si las condiciones lo requieren.
De hecho, el fenómeno meteorológico desató ayer un temporal intenso que dejó huellas visibles en la infraestructura y la actividad portuaria, especialmente en Puerto Caleta Paula, donde tres barcos artesanales de la Flota Amarilla –Yakisa, Barracuda y Alborada– se hundieron como consecuencia del fuerte oleaje y la violencia de los vientos, que alcanzaron velocidades cercanas a los 150 km/h.
Desde el mediodía se vivió una creciente inquietud en el área costera, cuando los responsables de la Unidad Ejecutora Portuaria de Santa Cruz (UNEPOSC) informaron que las embarcaciones habían sucumbido ante la fuerza de la tormenta. “Las condiciones meteorológicas fueron determinantes en el hundimiento”, explicaron mediante un comunicado publicado por el organismo estatal. No se reportaron personas heridas, pero la magnitud de las pérdidas materiales activó la coordinación de diversas agencias para controlar la emergencia y definir los pasos a seguir en el intento de recuperación de los barcos.
En cuanto a la circulación vehicular, las autoridades informaron que las rutas provinciales quedarán habilitadas al tránsito a partir de las 22 horas, aunque solicitaron a los conductores que mantengan la precaución, ya que en algunos sectores la intensidad del viento podría continuar siendo elevada.
El organismo provincial, en base a los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), anticipó que las ráfagas provenientes del oeste podrían superar los 110 km/h, un registro que excede ampliamente los valores habituales para la región.
El organismo climatológico indicó que hay alerta amarilla en gran parte del territorio, con excepción del suroeste. Sin embargo, en toda la costa santacruceña rige una alerta naranja. En dicha zona, los vientos pueden alcanzar hasta los 50 kilómetros por hora, con ráfagas que podrían llegar a los 115 kilómetros por hora. Por lo cual, se recomienda no refugiarse cerca de árboles y postes de electricidad que puedan caerse. Y buscar un lugar seguro bajo techo.
Para situaciones de emergencia, la población de Santa Cruz dispone de los siguientes números: Protección Civil: 103, Policía: 911 y Bomberos: 100. El COE Provincial continuará informando a la comunidad a través de los canales oficiales ante cualquier novedad, según la Secretaría de Estado de Comunicación Pública y Medios/Subsecretaría de Producción y Contenidos.
En tanto, el panorama en Chubut es distinto. Hoy se confirmó el regreso a la normalidad en las actividades escolares, luego de que el nivel de alerta meteorológica por vientos descendiera de naranja a amarillo en la mayor parte del territorio provincial y se descartara riesgo en las zonas restantes. Así lo comunicó el Ministerio de Educación de la Provincia del Chubut, que dispuso la reanudación de las clases presenciales en todas las instituciones educativas, conforme a los horarios habituales.
La decisión se fundamenta en la evaluación de los informes oficiales emitidos por la Subsecretaría de Protección Ciudadana, dependiente del Ministerio de Seguridad y Justicia, y el Servicio Meteorológico Nacional, organismos que confirmaron la mejora de las condiciones climáticas. El Ministerio de Educación subrayó que la totalidad de las escuelas de la provincia deberán retomar sus actividades en la fecha indicada, restableciéndose la rutina escolar interrumpida por la contingencia meteorológica.
No obstante, la cartera educativa aclaró que los equipos directivos de aquellas instituciones que, por razones de fuerza mayor, no puedan reabrir en los plazos previstos, deberán informar a sus respectivas comunidades educativas a través de los canales institucionales formales.
El Ministerio recordó a la ciudadanía que, ante situaciones de emergencia o necesidad de asistencia, está disponible la línea de Protección Ciudadana 0800-666-2447, habilitada para responder a requerimientos vinculados a la seguridad y el bienestar de la comunidad educativa.
A diferencia de ayer, y según el Servicio Meteorológico Nacional, la intensidad de los vientos es menor y afecta a la meseta de Escalante, Sarmiento y el sudoeste de Florentino Ameghino. El área será afectada por vientos del sector oeste con velocidades entre 42 y 50 km/h, con ráfagas que podrán superar los 80 km/h. No se descarta reducción de la visibilidad por polvo levantado por el viento.



