Un hombre sospechoso de haber participado del crimen de Enrique Ortiz, un curandero de 82 años que fue encontrado maniatado y golpeado en Córdoba, fue detenido este viernes. Los investigadores sospecharían que habría contado con la ayuda de un supuesto cómplice que, por el momento, seguiría prófugo de la Justicia.
En medio de la investigación liderada por el fiscal Alejandro Peralta Otonello, se recolectaron una serie de pruebas relevantes durante unos allanamientos concretados el viernes por la tarde. Pese a que no trascendieron detalles de los mismos, se confirmó que estos habrían permitido identificar a dos sospechosos.
Aunque las identidades de las personas calificadas como “de interés” se mantuvieron resguardados, las autoridades señalaron que se tratarían de dos hombres. De esta manera, se emitieron dos órdenes de detención, bajo la acusación de que habrían sido los autores del homicidio del curandero.
Según la información obtenida por el medio El Doce.tv, uno de los sospechosos fue detenido en plena vía pública. No obstante, el segundo de ellos todavía continuaría fugitivo, por lo que los investigadores se concentrarían en dar con su paradero lo antes posible.
Respecto a la detención del sospechoso, se conoció que se trataría de un joven de 23 años, que fue identificado cuando iba a cortarse el pelo en un local situado en el barrio General Bustos. Después de que surgiera la pista de donde se encontraba el sospechoso, el jefe de la Departamental Santa María, Héctor Villagra, lo encontró y arrestó en la peluquería donde se encontraba.
De la misma manera, las autoridades confirmaron que el detenido contaba con antecedentes por robo. Sin embargo, se estipula que en las próximas horas podría ser indagado e imputado por el delito de homicidio en ocasión de robo. Actualmente, se encuentra alojado en una comisaría local.
El hallazgo del curandero asesinado
El hombre, de 82 años, fue encontrado muerto el miércoles pasado en su vivienda ubicada en la localidad de Villa Los Aromos, en el Departamento Santa María, Córdoba. La víctima, que era conocida en la zona por ejercer como curandero, presentaba ataduras en los pies y signos de golpes en el rostro.
Según indicaron las fuentes del caso, el descubrimiento ocurrió cerca del mediodía, cuando un vecino ingresó a la casa ubicada sobre la calle Los Eucaliptos al 700 y alertó a las autoridades. En el lugar trabajaron varios efectivos de la Departamental Santa María, el personal de la división de Homicidios y miembros de la seguridad comunal.
En principio, la Fiscalía de Alta Gracia, a cargo de Alejandro Peralta Otonello, se centró en el entorno cercano del hombre. Sin embargo, al constatarse que el domicilio de Ortiz estaba completamente desordenado, los investigadores plantearon como hipótesis principal que se habría tratado de un crimen en ocasión de robo.
Por su parte, un sobrino de la víctima relató a los medios locales que la puerta de la vivienda se encontraba abierta con la llave colocada por fuera. Aunque Ortiz vivía solo, su familia mencionó que recientemente habría iniciado una relación de pareja.
De la misma forma, los familiares del curandero mencionaron que les había comentado en los días previos que tenía la intención de comprar un auto. Por esta razón, creen que esto podría haber llamado la atención sobre la posibilidad de que tuviera dinero en su poder.
Asimismo, los vecinos aseguraron que Ortiz gozaba de buen estado de salud y no se encontraba en una situación de vulnerabilidad. Después de que se recabaran los testimonios, el Ministerio Público Fiscal (MPF) ordenó la realización de varios peritajes y mantendría abiertas varias líneas de investigación. Incluso, se analizaron las cámaras de seguridad del pueblo, con la intención de dar con pistas y/o movimientos extraños que pudieran confirmar la hipótesis del fiscal.
