
Con la promesa de mayor velocidad, menor costo para el pasajero y un esquema de movilidad plenamente sustentable, la Ciudad de Buenos Aires inicia un cambio profundo en su sistema de transporte con el lanzamiento del Trambus: un modelo basado en buses 100% eléctricos, tecnología avanzada e integración total con el subte y los ramales ferroviarios urbanos. La línea inicial, conocida como T1, se implementará a fines de 2026, y cruzará la ciudad de sur a norte para unir Nueva Pompeya con el Aeroparque Jorge Newbery, incorporando carriles exclusivos, infraestructura moderna y paradores en puntos estratégicos.
El nuevo servicio funcionará como complemento de la red de subtes y apunta a reducir hasta un 40% los tiempos de viaje, operar las 24 horas y beneficiar a unos 50 mil usuarios diarios. Entre sus innovaciones se destacan la integración tarifaria mediante sistemas multipago, el acceso universal para personas con movilidad reducida y un esquema de diseño pensado para mejorar la experiencia, la seguridad y la conectividad de todos los pasajeros.
La fase piloto comenzará el lunes 17 de noviembre con la circulación de más de 50 unidades sobre el corredor del Metrobus de la avenida Juan B. Justo. Las autoridades porteñas anticipan que la experiencia de viaje cambiará de manera notable gracias a una red que facilita transbordos rápidos y que incorpora monitoreo, telemetría y control en tiempo real, combinando innovación nacional e ingeniería internacional en la fabricación de cada vehículo.

Un sistema integrado que prioriza la velocidad y la seguridad
Durante un recorrido por Palermo, que inició en El Planetario y terminó a metros de Puente Pacífico, el ministro de Movilidad e Infraestructura, Pablo Bereciartua, contó a los medios que el Trambus es mucho más que una nueva flota de unidades eléctricas: “Constituye un sistema completo pensado para reorganizar la movilidad en la Ciudad”, dijo.
“El tranbus es un sistema. Una parte del sistema son las unidades, pero es igualmente importante que esté pensado como un sistema integrado al subte. La lógica de esto es el subte radial al Obelisco, que estamos haciendo líneas norte-sur que cruzan las líneas radiales eléctricas, como es el Trambus: silencioso y que va a tener prioridad en la movilidad. Van a ser más rápidos que los medios que tenemos actualmente en superficie”, explicó.
Las unidades contarán con prioridad mediante los nuevos “semáforos observados”, que permiten que el vehículo se comunique digitalmente con la señal de tránsito y mantenga la luz verde al aproximarse. Según Bereciartua, “cuando llegan a una intersección, se extiende el verde y no se detienen. Eso hace que la velocidad promedio sea hasta un 30% superior a las que tenemos hoy en las líneas de colectivos”, asegura.

En materia de seguridad, las nuevas unidades incorporan los sistemas ADAS (de colisión frontal, cruce de peatones y detección de puntos ciegos) y DMS (monitoreo de la conducción), que suman cámaras y sensores para la asistencia a la conducción, la detección de incidentes y el monitoreo del estado del conductor. “Esta línea, como las 31 líneas que tenemos en la ciudad desde hace menos de un año, todas están centralizadas en nuestro centro de monitoreo”, explicó el ministro.
El funcionamiento eléctrico exige además una capacitación específica por parte de los choferes. “El motor eléctrico tiene la mayor potencia en el primer instante. Cuando apretás el acelerador, tenés el máximo de potencia, a diferencia de los motores a combustión. Eso implica generar una capacitación particular de conducción”, añadió. Además, estas unidades tienen cámaras en lugar de espejos retrovisores externos, “lo que requiere entrenamiento específico”, contó.
La promesa es que los usuarios encuentren también paradores de nueva generación, nueve de ellos icónicos, con diseño renovado, espacio para logística de última milla, guardabicis y cargadores para autos eléctricos. Todo este entramado busca definir un salto cualitativo en la experiencia diaria de cada viaje. “Hoy, el traslado entre Pompeya y Aeroparque en colectivo demanda cerca de 100 minutos; en el Trambus, la estimación oficial es de una hora y cinco minutos, lo que recorta entre 35 y 40 minutos por sentido», anticipó el funcionario durante el recorrido piloto en el que subrayaba el silencio en el interior de la unidad, al no escucharse el ruido del motor del vehículo moderno.
En la Ciudad de Buenos Aires se mueven alrededor de 3,6 millones personas cada día, de los cuales el 47 % lo hace en transporte público

Innovación industrial y un corredor troncal
En el breve trayecto sobre Av. Intendente Bullrich, entre las avenidas Cerviño y Santa Fe, Bereciartua contó que este proyecto también representa “un avance para la industria nacional” ya que los vehículos del Trambus combinan innovación local con ingeniería internacional. El chasis autoportante, diseñado y fabricado por Agrale Argentina S.A., se integra con un motor eléctrico, baterías y software desarrollados junto a la empresa británica Equipmake LTD. Para asegurar esa integración, un prototipo producido en el país fue enviado al Reino Unido, donde se completó la instalación de los sistemas eléctricos.
La carrocería está a cargo de TodoBus S.A. y cuenta con un 90% de materiales de origen nacional, una decisión que colabora con la cadena de valor local y garantiza disponibilidad de repuestos. “Es industria nacional. Hicimos una licitación, hubo cinco empresas que compitieron de varias procedencias: China, España… Finalmente, la que ganó es una empresa argentina. Por primera vez, la Argentina empieza a producir unidades de una nueva categoría de vehículos que son los trambuses”, celebró Bereciartua.
La T1 será un corredor troncal que conectará Nueva Pompeya con Aeroparque durante 18 kilómetros, enlazando barrios como Parque Patricios, Boedo, Caballito, Villa Crespo y Palermo. Tendrá conexión directa o cercana con cinco líneas de subte (A, B, D, E y H), con estaciones de los ferrocarriles Mitre, San Martín y Sarmiento, y con el Metrobus del Sur y el de Juan B. Justo. “Para su óptimo funcionamiento, se construirán 71 paradores, de los cuales 11 serán icónicos y estarán ubicados en centros neurálgicos, por ejemplo, en Caballito, Palermo, Aeroparque, e incluirán, espacios de guardados de bicicletas, lockers especiales para la logística, entre otros usos», asegura el funcionario.

Este modelo busca fortalecer una Ciudad más policéntrica y equitativa. “Buscamos con este sistema ir hacia la ciudad policéntrica. La Ciudad de Buenos Aires tiene mucha actividad concentrada en el centro, ahora en el norte, Belgrano y Núñez, y en el microcentro. El sistema va a ayudar a distribuir y a volver más accesibles a un conjunto de barrios. Cuando ves el plano de Buenos Aires, lo que ves es una cuadrícula eléctrica: por debajo el subte, por arriba los arcos norte-sur, que más o menos de manera equidistante unen el subte con la superficie”, explicó Bereciartua.
Está prevista la circulación de más de 50 unidades, con una autonomía mínima de 270 km. Respecto a las medidas, cada vehículo mide aproximadamente 12 metros de largo y cuenta con una capacidad para transportar a más de 70 pasajeros. Además, incluirán vehículos articulados, de aproximadamente 18 metros de largo, con capacidad para 120 pasajeros, con espacios para personas con movilidad reducida. Todos los vehículos serán accesibles, con piso bajo, suspensión neumática, rampas, aire acondicionado y USB.
La puesta en marcha completa del sistema implicará más de 80 obras, que incluyen paradores, intervención en cruces, adecuación de carriles e instalación de equipamiento tecnológico. “Nuestro objetivo es que esté operativo en agosto del año que viene, cien por ciento”, adelantó el ministro. En la primera etapa, el servicio funcionará con pasajeros de la línea 34 y sumará unidades conforme avancen las entregas. “Le estamos dando un norte al capital privado para decirle vengan e inviertan porque esta Ciudad va a transformarse”, dijo sobre este sistema el jefe de Gobierno, Jorge Macri.

Los recorridos
- En la zona norte de la Ciudad hacia Aeroparque: desde Av. Sáenz; Av. Almafuerte; Diógenes Taborda; Av. Caseros; Av. La Plata; Av. Rivadavia; Av. Acoyte; Av. Ángel Gallardo; Av. Honorio Pueyrredón; Av. Juan B. Justo; Av. Int Bullrich; Av. Dorrego; AU Illia; Av. Sarmiento y Av. Costanera Rafael Obligado.
- En la zona sur hacia Nueva Pompeya: Av. Costanera Rafael Obligado; Av. Sarmiento; Av. Figueroa Alcorta; Av. Dorrego; Av. Intendente Bullrich; Av. Juan B. Justo; Av. Honorio Pueyrredón; Neuquén; Av. Acoyte; Av. José María Moreno; Formosa; Av. La Plata; Av. Chiclana; Alagón; Uspallata y Av. Sáenz.
- En el trayecto de Av. La Plata, atravesará el límite de los barrios de Parque Chacabuco, Boedo, Almagro y Caballito; y tendrá conexión con la Estación Av. La Plata, de la Línea E de subte.
- En Caballito tendrá conexión con las estaciones Acoyte y Río de Janeiro de la Línea A de subte y cercanía con Estación Caballito (FFCC Sarmiento).
- En el barrio de Villa Crespo tendrá cercanía con la Estación Villa Crespo (FFCC San Martín) y la Estación Dorrego, de Línea B del subte.
- En el recorrido por la avenida Intendente Bullrich tendrá conexión con el Centro de Trasbordo Pacífico, la Estación Palermo de la línea D de subte, la Estación Palermo (FFCC San Martín) y cercanía con la Estación 3 de Febrero (FFCC Mitre).
- En la Av. Costanera Rafael Obligado, llegará hasta el Aeroparque Jorge Newbery donde se dispondrá la cabecera norte de la traza Trambus T1.



