Después de haber permanecido prófugo de la Justicia por casi tres años, la Policía de la Ciudad confirmó la detención del sicario brasileño Fabio Rosa Carvalho, conocido como “Noia” y líder de la banda criminal “Os manos”. Tras surgir la pista de que el fugitivo podría encontrarse en el país con una identidad falsa, se revelaron cuáles fueron las pistas que permitieron dar con su paradero.
El arresto se concretó el viernes por la noche en el barrio porteño de Caballito, luego de que se montara un operativo para interceptarlo cuando había ido a cortarse el pelo. Por medio de un seguimiento a través de las cámaras de seguridad, los efectivos lo localizaron en la intersección de avenida Pedro Goyena y Cachimayo a las 19:45 horas.
Sin embargo, ese sería el final de una larga investigación que contó con la participación de la Policía de Rio Grande Do Sul, la Policía de Córdoba y la Policía de la Ciudad. Luego de que se activaran las alarmas por la fuga de Carvalho en 2023, las autoridades brasileñas sospechaban que el criminal podría haberse encontrado en Córdoba.
De acuerdo a la información publicada por El Doce.tv, el líder de Os manos había sido detenido en Brasil en 2013 y recibió una condena de casi 17 años de prisión. Al momento de fugarse, había sido beneficiado con la libertad condicional y, pese a que portaba una tobillera electrónica, logró cruzar la frontera hacia el territorio argentino. Solo le faltaba un año para purgar la pena.
Para poder dar con su paradero, la Policía brasileña inició un seguimiento a través del uso de sus tarjetas de crédito y logró localizarlo en Córdoba, donde utilizaba una cuenta bancaria. Esto motivó el contacto con las autoridades cordobesas, pero poco después el hombre volvió a ser registrado en la Ciudad de Buenos Aires.
Un viaje que Carvalho solicitó a través de una aplicación sería el dato clave que permitió orquestar su futura detención. Pues no solo se lo vinculó al domicilio en el que residía en Caballito, sino que confirmó que se manejaba con una identidad falsa.
De esta manera, se conoció que el acusado de haber participado en, al menos, 150 homicidios burló a las autoridades argentinas con una cédula brasileña falsa. Según el documento apócrifo, su nombre era Gilmar Dos Santos. Para ese entonces, ya habían recolectado las pruebas necesarias, que permitieron ordenar su inmediata captura.
Fue así que lo interceptaron cuando ingresaba a una peluquería y se entregó a los efectivos presentes en el lugar. Según informaron este sábado desde la Policía Federal Argentina (PFA), el detenido ya fue expulsado de Argentina y se encuentra nuevamente bajo custodia de la Justicia en Brasil.
No sería la primera vez que integrantes de la banda criminal Os Manos fueron detenidos en distintas ocasiones en Argentina. A fines de julio de 2023, la Policía de Misiones arrestó en San Vicente a Víctor Eduardo C.F., de 20 años, buscado internacionalmente tras escapar de la justicia brasileña y romper una tobillera electrónica. El joven, aunque carecía de alto rango, cumplía funciones relevantes dentro de la organización y tenía contactos en Posadas que facilitaron su ingreso ilegal al país.
En enero de 2024, los efectivos de la Unidad Regional II de Oberá detuvieron en Colonia Aurora a Jonás Vieira, otro integrante de la banda. Las autoridades establecieron su entrada ilegal a Argentina y dispusieron su deportación por el paso fronterizo de Alba Posse hacia Porto Mauá. Vieira fue entregado a la Policía Militar de Santa Rosa, Brasil.
Os Manos surgió tras 2018 en la frontera entre Brasil y Uruguay. Mantiene una disputa con Bala Na Cara por el control de rutas del tráfico de drogas y armas, lo que provocó un aumento de la violencia en la región. En octubre de 2021, el líder Luan “Guí” Barcellos fue detenido en Porto Alegre. Dos años después, la Justicia brasileña condenó a 23 miembros de la organización por diferentes delitos en la frontera.
