Un fuerte golpe en el rostro tras un choque con Rick dejó a Lisandro Magallán fuera de la cancha y bajo observación médica tras la derrota de Vélez Sarsfield por 1-0 ante Talleres de Córdoba en el estadio José Amalfitani por la fecha 14 del Torneo Clausura. El defensor sufrió una fractura del arco cigomático, una lesión que requirió su internación inmediata en el hospital San Juan de Dios de Ramos Mejía y generó preocupación en el equipo de Liniers de cara a lo que serán los playoffs del certamen.
El incidente se produjo a los cinco minutos del segundo tiempo cuando Magallán y Rick saltaron a disputar un balón en la mitad de la cancha. El jugador de Talleres impactó con la nuca en el rostro del zaguero de Vélez, quien quedó tendido en el césped, aturdido y con un hematoma bajo el ojo izquierdo. La gravedad del golpe obligó a su reemplazo inmediato: el juvenil Thiago Silvero ingresó por el ex Boca Juniors mientras la inquietud crecía tanto en el cuerpo técnico como en los fanáticos de El Fortín.
Horas después del partido, el parte médico oficial confirmó la magnitud de la lesión: “Se le realizaron estudios de tomografía computada de cerebro y macizo facial. Tras los exámenes se determinó que presenta una fractura del arco cigomático”. El comunicado también informó que el defensor permanecería internado y bajo observación durante al menos 24 horas, siguiendo el protocolo para este tipo de lesiones.
El estado de Magallán y los pasos a seguir en su recuperación se mantienen bajo estricta vigilancia médica. Los especialistas realizaron estudios para descartar daños adicionales y, según el informe del club, durante la semana se evaluarán las opciones de tratamiento más adecuadas. Por el momento, no se indicó el tiempo estimado de recuperación, lo que genera incertidumbre sobre su regreso a las canchas de un equipo que ya sacó su pasaje para los octavos de final del Clausura. Si bien no es oficial, se especula que podría no volver a jugar en lo que resta del 2025.

La baja de Magallán representa un desafío para Vélez en la recta final del torneo. Aunque el equipo dirigido por Guillermo Barros Schelotto cuenta con alternativas en la defensa, como Aaron Quirós (quien ocupó el lateral izquierdo en este encuentro) y Emanuel Mammana, la situación se complica por la prolongada recuperación de este último, quien aún no superó un esguince de tobillo. La presencia de Silvero como reemplazante inmediato ofrece una opción, pero la solidez defensiva del equipo queda en entredicho de cara a los próximos compromisos, incluido el duelo ante Gimnasia dentro de nueve días en la previa a la última jornada en la que el conjunto de Liniers recibirá al River de Gallardo.
La derrota ante Talleres como local tuvo repercusiones en la tabla de posiciones. El gol de Mateo Cáceres, el primero en su carrera en Primera División, permitió al conjunto cordobés alejarse de la zona de descenso y acercarse a los puestos de playoffs, ubicándose octavo en la Zona B. Por su parte, Vélez se mantiene en la cuarta posición con 25 puntos, sin posibilidades de alcanzar el segundo lugar, pero con la tranquilidad de haber asegurado su clasificación a la siguiente fase del certamen.
Mientras el plantel y el cuerpo médico de Vélez analizan los próximos pasos para la recuperación de Magallán, la decisión sobre el tratamiento definitivo se tomará tras una serie de consultas médicas programadas para los próximos días.

El parte médico sobre la lesión de Magallán:
Lisandro Magallán sufrió un traumatismo directo en el pómulo izquierdo durante el segundo tiempo del encuentro ante Talleres.
Fue trasladado a la guardia del Hospital San Juan de Dios de Ramos Mejía donde se le realizaron estudios de tomografía computada de cerebro y macizo facial. Tras los exámenes se determinó que presenta una fractura del arco cigomático.
El defensor quedará bajo cuidado y en observación por protocolo durante las próximas 24 horas. En el transcurso de la semana se realizarán interconsultas para evaluar el tratamiento a seguir.



