En medio de la Autopista Ricchieri, a la altura del Mercado Central y con la tarde del caluroso domingo aún iluminada, Guillermo regresaba de pasar el día en el partido de Ezeiza a bordo de su moto. Lo que parecía una vuelta a casa sin sobresaltos se transformó trágicamente en cuestión de segundos: una banda de seis motochorros ejecutó un robo sincronizado y lo dejó sin su vehículo en plena traza de la autovía. Todo quedó filmado y las imágenes son brutales.
La secuencia se desarrolló este domingo cerca de las 17, en dirección a la Ciudad de Buenos Aires. La víctima, quien en marzo cumplirá 63 años y suma cinco décadas manejando motos, volvía de pasar un domingo de descanso en un recreo.
Al momento del hecho circulaba solo en su rodado, el cual elige como su medio de transporte diario, a pesar de tener un auto en su casa que junta tierra, según pudo saber Infobae.
A dos kilómetros del peaje que está a la altura del Mercado Central, el escenario cambió de golpe. Una moto con dos ocupantes se le puso adelante y, a los costados, otras dos lo flanquearon. Guillermo sospecha que una cuarta venía detrás, como apoyo, aunque no pudo confirmarlo.
Los atacantes, seis en total y todos armados, actuaron de manera coordinada y veloz, como si tuvieran estudiado el ataque y la zona, destacaron las fuentes consultadas por este medio.

El procedimiento resultó meticuloso. Uno de los asaltantes lo obligó a detenerse y lo palpó en busca de objetos de valor, revisó sus bolsillos y, pese a la amenaza, dejó el celular de la víctima.
En ese momento de tensión, Guillermo solo atinó a suplicar por su vida: “Para, para. Tomá, tomá, tomá. Te la doy la moto, no me hagan nada”, se lo escucha decir en el audio del video del robo que fue grabado por una cámara que tenía en su casco.
El ladrón tomó la moto mientras bajaba a los manotazos y de manera violenta a la víctima. En ese momento, Guillermo se dio la vuelta y se fue, temeroso. Aturdido y sin saber cómo proceder, el motociclista fue auxiliado por un automovilista que fue testigo involuntario de todo: era el conductor de una Mercedes Benz Sprinter.
“¿Chocaste?”, le preguntó el automovilista. “No, me afanaron. No sé qué hacer. No sé si me pueden llevar. ¿Me querés alcanzar?”, respondió Guillermo, todavía en shock. El testigo, un desconocido que pasaba por el lugar, no dudó en asistirlo. Lo contuvo y lo trasladó hasta la dependencia policial de la localidad de Tapiales, acompañándolo a radicar la denuncia.

El hecho se produjo en una zona ampliamente transitada y con presencia de cámaras. Esta autopista atraviesa la zona sur del conurbano bonaerense y es una de las principales arterias de acceso y egreso desde la Ciudad de Buenos Aires hacia el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
“Ellos sabían lo que hacían y conocían bien el lugar”, insistió una fuente consultada por este medio sobre el ataque a Guillermo.
La denuncia quedó radicada en la comisaría de Tapiales y la investigación será llevada a cabo por la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº12 de San Justo, a cargo del fiscal Matías Nahuel Marando. El relato de la víctima, sumado a la grabación del casco y las cámaras de seguridad, forma parte del expediente que busca identificar a los responsables del robo en la Autopista Ricchieri.



