
“Italia no puede ser el punto de llegada de inmigrantes de todo el mundo”, afirmó el viceprimer ministro, Matteo Salvini, durante una declaración en la que llamó a la Unión Europea a “moverse” y “despertar” para acudir en ayuda del país transalpino.
“Italia no puede ser el punto de llegada de inmigrantes de todo el mundo”, afirmó el viceprimer ministro, Matteo Salvini, durante una declaración en la que llamó a la Unión Europea a “moverse” y “despertar” para acudir en ayuda del país transalpino.